Cuando la escritora Märta Tikkanen publicó su obra que luego alcanzaría fama mundial, “Män kan inte våldtas” (No se puede violar a los hombres), fue agredida en la calle. Cuando era directora de la institituto suecohablante de educación de adultos en los años 70, sostuvo sus mayores combates en el tema del feminismo, en vez de la política.