Katariina Styrman desempeñó durante varios años diversos cargos en la Unión de Estudiantes de la Universidad de Helsinki, y desde allí pasó al servicio de la Sociedad de la Sauna, para promover la cultura de sauna finlandesa. Styrman dedica parte de su tiempo libre a la junta directiva de la Asociación de Alumni de la Universidad de Helsinki, procurando que la Universidad siga siendo relevante también para aquellos que ya han terminado su carrera y están orientados hacia el mundo del trabajo. En ocasiones Styrman cuenta algún chiste políticamente incorrecto, pero siempre justificándolo correctamente, como historiadora que es.